El Convento fue fundado en el año 1510 pero de su obra original solo queda la iglesia, una pequeña joya que reúne un pórtico de Hernán Ruiz I, una bóveda e su sucesor, Hernán Ruiz el Joven, según diseño de Diego de Silové, valiosos cuadros y un magnifico artesonado mudéjar bajo el que destacan el coro y una sillería tallada del siglo XVI